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Hemisferio Derecho

by Viciado de Nulidad

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1.
Huelgas ilegales 09:15
2.
Organizaciones subterráneas 13:49
3.
Proclamas clandestinas 09:33
4.
Manifestaciones en las calles 05:51
5.
Choques con las tropas 04:54
6.
Entremecho 1 01:00
7.
Tantas sectas como humanos 06:07
8.
Tantas luchas como egos 05:51
9.
Divididos en nombre del amor 16:45
10.
Separados y de reojo 11:29
11.
En espejo dactilar 10:55
12.
Embrutecidos 08:05
13.
Idiotizados 04:45
14.
Celebrantes 04:35
15.
Paralizados 12:42
16.
Intoxicados 14:25
17.
Ignorantes 08:47
18.
Desechados 05:27
19.
Festejantes 15:23
20.
Por las dudas pidiendo más 07:34
21.
Entremecho 2 01:00
22.
Son los dueños de 11:19
23.
Los movimientos de nuestras pupilas 07:05
24.
Las exudaciones de nuestros poros 16:32
25.
Es el prodigio de 10:06
26.
La recolección de datos 13:34
27.
En el más prodigioso tormento 10:51
28.
Entremecho 3 01:00
29.
La pluralidad de mundos 10:02
30.
Es real es acá 07:53
31.
La mirada del otro y lo que sos 10:40
32.
Esas dos realidades 09:09
33.
Alegremente paralelas 10:12

about

De a poco se va derrumbando todo, oscuridades, luminosos enlentecidos, se está pudriendo todo, ya pasamos todas las fechas escritas, seremos dioses sólo en desintegración, estamos en carrera, viajando hacia la inexistencia, celebrando, sufriendo de nervios por todo el entretenimiento que estamos obligados a consumir, por obligación nada, podría recomendar el articulito emancipador y todos van a seguir lookeándose para el sacrosanto viernes y subiendo la condenada fotito, el mundo no para de engendrar esos parásitos regaladores de islas para sus noviecitas semanales, ante tanto engaño pornográfico, abrazar la propia deconstrucción, hermetismo y ocultamiento, altar a lo que se muestre.

Se ríen, son graciosos, llevan puñales por dedos, llevan histeria de corazón, maquillaron lo confuso con implementos cuidadosamente administrados, soñaron la orden, se mojaron con obedecer.

Refunfuñando ante quien no se dé por enterado de que es mía la transacción del silencio universal.

Una mente incorrecta, un error social, ni siquiera contar como molestia, un error. La épica del rasguñe.

Es probable que el demiurgo haya obtenido sus elementos de divinos aparatos excretores.

Cuello partido, doblado hacia el sí señor, con mirada que exhibe la verdadera dimensión, al ras está, el sustento odiado como la vida, la misión del día cero, inclaudicable ella y sus agentes, para ver lo que nunca va a ser, el lugar del conocimiento desmentido, como el soplo de un espíritu teorizando materia.

Un sucedáneo, ya que no se puede subir el volumen al silencio. Varios episodios de relajamiento mental, una pequeña lejanía, demasiado pequeña. Hablando solo por la calle, peleado, amigado, contento, enojado, canchero, discriminado, deprimido y recuperado.

Sangre de hermanos.

Puto rebaño.

Películas muestran hasta el infinito los buenos, los malos y el ocultamiento del trabajo. Muestran el futuro luminoso con estética de publicidad. ¿Hay alguna otra luz? ¿Hay luz? ¿Hay sol o sólo yanquichino fabricador de lámpara con obsolescencia programada?

Se quieren abrir paso los monjes en medio de la electrificación, largo proceso, invención, pagando las culpas, la conciencia total, castigo lento y eterno, decir caída al desprendimiento, desgarre, la carne hecha verbo.

Cierto psiqueo de círculo, de usar el todo como la partícula elemental, de ser dios y una basura para ser el caído sin necesidad y con sufrimiento hasta el fin de los tiempos.

Una noticia habla de moderar el escote en política, la otra anuncia escote de celebridad, mientras el histórico fiasco va pululando; mientras la crítica, información y racionalidad son introyectadas en la vena universal como irresponsabilidad y peligro de muerte. En ese nivel estamos.

Un asesinado sin querer, un intento de suicidio, y al tiempo no le importa nada y por eso es nuestro aliado, no le importa y está de mal humor, nos sana y tampoco le importa, con implacable serenidad, con certeza implacable, y mientras tanto acá estamos, empeñados en alisar y sonreír.

Agradece lo que no es para él, dice igualmente cuando no aplica, se va demasiado pronto por miedo a quedarse más de la cuenta, vive en estado de arrepentimiento, es el original del doble de dostoievski, es el idiota sin poesía ni calidez.

No toma, no consume, no tiene pareja, es altamente sospechoso, no de algo sino de hecho, tiene un problema, sólo hay que saber cuál es.

La matriz, quién se atrevería...

Afuera de la caja... claro...

Ofendidos y reivindicadores, todos contra todos bajo el manto evangélico de la mancomunión, el aliento es el enemigo, todos transmitiendo en vivo corazoncitos de vaporización.

Rebosan vitalidad los pulgares de ese humano que dice no aguantar más, y lo comunica y lo vuelve a comunicar, es un exceso de sucedáneo de vida a través de esos pedacitos de cuerpo que faltan al mono, para su gran suerte.

Mirar para ahí, ese infinito, en suspenso, ese aleph que no muestra nada, espera del detalle revelador, ahí en espera del rayo luminoso, tener el universo al alcance, exigir su sentido en el entripado, recursivo, espejo, vacío.

Buscando y buscando el éxtasis, ya está por venir, rápido que no hay tiempo, estamos muy ocupados buscando el éxtasis, no podemos perder el tiempo buscando el éxtasis, ya está por venir, más abajo, más abajo, hay que bajar un poquito más, ya está por venir, anda por ahí abajo, habría que ir a buscarlo pero ya está por venir.

Puede ser eternidad o lo efímero, un modo de estar en el presente; puede ser ver lo que hay delante de los ojos o asfixia entre lo que está a punto de aparecer y de desaparecer, el presente anterior a que hubiera que nombrarlo, el dios que no había que buscar, el que implica acallar tantas cosas.

La muerte se envolvió en un coso que decía gloria.

Bienvenidos al apocalipsis, esta orgía de entretenimiento degradante repitiéndose a sí mismo hasta el infinito, y todos agradeciendo y pidiendo más, con risas histéricas medicalizadas, gritando a garganta pelada la vida de los demás.

La palabra: repulsión.

La palabra: reclusión.

¿Otra casa maldita? ¿Otra nenita y su camisón y su muñeca y su temorcito? ¿Otro rebelde con su infaltable cara de loco híper profesional?

Ahogado y agudo, cayendo como moscas, apilado en las esquinas, hediendo por siempre amén, sostenido en sus brazadas, supercherear otro cubiertito plateado, se muestra la univocidad, agarrando de mala forma agujerear, hilado paraiseal excluyó un poquito, conocerse en el vómito, ir construyendo el propio determinismo, volar.

Con la monadología en la mano tratando de comprender este sistema viviente en el que despotrique y legitimación sonríen tranquilos desde la cumbre del olimpo.

A veces se pierde la cabeza, queda surfeando sobre un algo pero qué, ideagen, imadea, conectados en la magia irreductible; enriquecedora, luego, imposible de aprehender; es una cadena que de terminar va a esa cosadios que ni protopregermen llega a ser en desgraciado intento a base de mentida invención, coso mental, recostarse con una vaguedad que respira quieta, somos la lástima del futuro, necesarios, confundidos, infinitos.

Qué bueno que nada importe. Qué bueno que todo va a desvanecer. Qué bien, nadie nos recordará en quince minutos. Todos los sufrimientos, polvo. Perdido el dolor. Los éxitos, la gloria, las sonrisas y el amor; todo aplastado en la más despiadada indiferencia. El tiempo, dios.

Resignifico, redimensiono y borro.

La inestabilidad, el desequilibrio y el quiebre siempre cerca; el borde, el límite, acechan. Enceguecimiento que saca a relucir todas las tesis juntas de cuanto experto en otras mentes haya por ahí, abandonar el grito mudo, la conciencia de la mirada del otro, arañar el aire, destrozar las uñas, la tensión del cuello, abandonar para siempre.

Una inmovilidad se dirige hacia el estómago, se queda y revuelve y muere sobre sí, saturación de falsa transparencia, vuelve espejada y no estamos ahí, panóptico de luz, cuidado que ser dios es no tener mundo, cuidado que un día la no existencia se va a demostrar sobre sí.

Dibujate la sonrisa como un payaso, igual ya tenías las caritas para toda variedad, cinchá y cinchá de los extremos para abajo, de las comisuras, te van a preguntar qué te pasa, por qué te esforzás tanto por estar mal, vas a tener que desgarrarte ese revoque, destino de paria, de muerto, de no supo vivir, de desperdicio, de dios le da pan.

Soñar que un relato domina el mundo, despertar y hacerlo realidad, ser el oráculo, la pitonisa, la profecía y la salvación. Mostrarse como el nuevo testamento, ser el antiguo. El visionario, el que sabe ver y decide crear los problemas para los que ya tiene solución. Será alabado y adorado, vomitará sobre todos ellos.

Una imbecilidad consensuada llamada vida, despotricando a morir, viviendo a través de la genialidad de los demás, buscando alguna renuncia, alguna excusa y conformidad, disfrazarla de intelecto, obtener la misma paz imbécil de los amuchamientos de armónicos imbéciles consensuados, último ejercicio de epicidad mental, llevarnos a un futuro donde es normal toda la basura que hoy es novedad, somos resultado de varias luchas perdidas, y de las que dejaron ganar.

Todos fantaseamos con un futuro redentor, abrazar la botella en el mar, esperar con la paciencia de los dioses el alma gemela en espacio y tiempo que se quiera dar, que llore por nuestra lejanía, que piense en nosotros y devuelva el equilibrio universal, tan necesaria la posvida.

Ser un fiel seguidor de la ritualística obligada hasta el último segundo, un convencido servidor, llevar con orgullo el estandarte de cada sin sentido, absorber como quien abre los brazos y respira en la cumbre de la montaña, aprovechar hasta la náusea de las posibilidades, abrazarse con destino de aniquilación hasta a la última de las degradaciones.

Sonríe con ojos azules, sonríe mirando para otro lado, un horizonte lejano, una cosa que no existe, ni la cosa ni la mirada ni quien mira, todo es de otro lado, es la confesión del odio interno, del enemigo en casa, sonríe con inocencia y orgullo, dulzura y orgullo por la religión de tripas chorreantes, cuidadosamente suministrada hablando de ríos y montañas, es el derretimiento de los corazones, es la caricia parcuda, es el viva en el lenguaje del maten, sonrisa tierna alienada de ideales de importación, cuello retorcido hacia la nada lejos, el vacío dentro, el horror detrás con el permiso del desconocimiento sanamente autogestionado, todo tapado con grititos de pañuelo revoleante.

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released November 2, 2020

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Viciado de Nulidad Montevideo, Uruguay

Variedad de ruidos para desgarrar el mal disfraz de orden, racionalidad y sentido de este mundo nuestro.

Variety of noises to tear apart the bad disguise of order, rationality and meaning of this world of ours.

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